Consumir alimentos sanos y variados que aporten los nutrientes necesarios sin alterar el equilibrio hormonal es una de las claves de la fertilidad.
En la mayoría de países europeos la tasa de natalidad ha bajado considerablemente en los últimos años. En el caso de España se ha pasado de 21 nacimientos por mil habitantes en 1960 a 8,41 en el año 2018. Este descenso se debe principalmente al cambio del modelo social, pero hay también otros factores que podrían afectar a la capacidad reproductiva tanto del hombre como de la mujer.
Según la Organización Mundial de la Salud se considera que una pareja es infértil cuando no consiguen el embarazo tras intentarlo durante un año. En España se calcula que se hallan en esta situación unas 800.000 parejas, lo que supone entre un 15 y un 20% de las que están en edad fértil. Pero las cifras podrían ser aún más elevadas ya que el cálculo se basa en las parejas que buscan ayuda y no se tiene en cuenta las que simplemente renuncian a ser padres sin hacerlo.
En un 40% de los casos el motivo por el que no se consigue el embarazo está en la mujer; en otro 40%, en el hombre; y hay un 20% en el que las causas son mixtas o desconocidas.
Las causas de infertilidad pueden ser muchas y muy variadas; se han identificado diferentes factores relacionados con el estilo de vida que aumentan la probabilidad de padecerla, principalmente la edad, la alimentación, el estrés oxidativo, los contaminantes ambientales, las variaciones del peso corporal y el consumo habitual de tabaco, alcohol y cafeína.
Llevar una alimentación adecuada no es la clave del éxito pero se admite con muy pocas dudas que una alimentación equilibrada y variada es importante a la hora de favorecer la fertilidad.
Como veremos a continuación, en el delicado equilibrio que hace posible la fecundación es esencial el papel de determinados nutrientes.
¿Qué alimentos o nutrientes impiden o favorecen tu embarazo?
La falta de omega-3 en la dieta influye en la fertilidad
Más grasas «buenas»
En la mujer, una alimentación pobre en grasas está relacionada con alteraciones del ciclo menstrual. También se ha asociado con la infertilidad femenina el consumo excesivo de grasas trans.
En los hombres, la membrana de los espermatozoides contiene altas concentraciones de ácidos grasos poliinsaturados, sobre todo omega-3, que le dan la fluidez necesaria para fecundar.
Vitaminas y minerales básicos
El estrés oxidativo afecta a las funciones básicas que determinan el éxito de un embarazo y por ello es fundamental ingerir las vitaminas y minerales que nuestro organismo requiere y que actúan como antioxidantes.
En la fertilidad femenina:
- Las vitaminas C y E, los carotenoides, el selenio y los polifenoles son grandes antioxidantes y mejoran la viabilidad del embarazo. Alimentos como los cítricos y la mayoría de verduras y hortalizas son beneficiosas en este sentido.
- La vitamina E también se ha relacionado con la fertilidad
- La vitamina B12, que se encuentra casi exclusiva en alimentos de origen animal, también se relaciona con la infertilidad femenina. Por eso es fundamental la suplementación de esta vitamina en dietas vegetarianas.
- Se cree que otras vitaminas como la E también están relacionadas con la fertilidad aunque no es un hecho demostrado.
En la fertilidad masculina:
- El cinc, un mineral relacionado con la funcionalidad y el número de espermatozoides, así como la síntesis de testosterona, resulta básico. Por ello, alimentos ricos en cinc –las ostras, el marisco, la carne y el pescado, pero también alimentos vegetales como los cereales integrales, el chocolate o las semillas de calabaza– son adecuados para mantener la fertilidad.
- Los antioxidantes mejoran los parámetros espermáticos.
Proteínas en equilibrio
En el caso de la mujer, el consumo excesivo de proteínas de origen animal se ha asociado a un mayor riesgo de infertilidad de origen ovulatorio. Por eso es recomendable buscar ese equilibrio y aumentar la ingesta de proteínas de origen vegetal cuando se está buscando un embarazo.
En el caso de los hombres, los datos no están tan claros… pero sí que parece que la arginina (uno de los aminoácidos que componen las proteínas)es importante en este sentido ya que al menos ayudaría a mejorar y mantener la erección. Algunos alimentos ricos en arginina son los frutos secos, especialmente las nueces y los cacahuetes.
Escoger la opción «bio»
Si los alimentos de cultivo ecológico son siempre recomendables, mientras se busca el embarazo y también durante la gestación son casi una elección vital. Los residuos de plaguicidas pueden alterar el equilibrio endocrino de la madre y al mismo tiempo afectar al desarrollo sexual y neurológico del bebé.
El peso corporal…
Además hay que tener en cuenta en ambos sexos que existe una clara relación entre la fertilidad y el peso corporal. El embarazo se hace más difícil tanto si hay obesidad como infrapeso: en ambos casos se producen alteraciones hormonales que interfieren en la capacidad reproductiva.
Y por supuesto hay otros muchos factores que pueden ayudarnos a ser más fértiles. Un estilo de vida saludable con una buena alimentación, descanso y ejercicio físico es básico. Y evidentemente dejar de lado el café, el alcohol o el tabaco!