El café es uno de esos alimentos polémicos, que no se deja encasillar fácilmente como bueno o malo… en este post Resolvemos tus dudas y te enseñamos a elegir las opciones más saludables.
¿El café es bueno o malo? He aquí la cuestión…
Hace algún tiempo te hablábamos en el un post sobre los beneficios del café, que evidentemente los tiene, es un gran antioxidante por ejemplo!
Pero seguro que también has oído hablar un millón de veces sobre lo perjudicial de esta bebida, que si la cafeína, el riesgo que se le asocia a padecer enfermedades cardiovasculares, incluso diabetes…
Lo que está claro es que el café es una de las bebidas más consumidas en el mundo y por ello uno de los alimentos más estudiados. Estudios que muchas veces dan la voz de alarma pero que alrededor de los cuales hay mucha desinformación, me explico.
Es importante saber de qué forma se han realizado estos estudios para saber quién es el verdadero culpable de sus resultados. Por ejemplo, un resultado muy común es asociar a las personas que consumen café con mayor riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, incluso diabetes. Pero… qué hay de los hábitos de esas personas? Los sabemos?
Si nos fijamos en los hábitos de las personas que participaron en los estudios, posiblemente los resultados cambien. En estudios concretos al separar las personas que tomaban café y fumaban, estas seguían sufriendo el riesgo de desarrollar diabetes y trastornos cardiovasculares. Sin embargo, las personas que tomaban café pero no fumaban, no presentaban ese peligro. Por lo tanto el culpable es el tabaco NO el café!
Lo que quiero decir con esto es que por el momento las evidencias científicas sugieren que el consumo moderado del tipo ADECUADO de café NO resulta nocivo para la mayoría de personas. Y dicho esto aprovecho para despejar algunas de las dudas más repetidas en torno al café:
1. ¿La cafeína es mala para la salud?
La cafeína (un consumo moderado) es estimulante y prepara al organismo para asumir un esfuerzo físico, incluso mental. Además aumenta la concentración, mejora la memoria a corto plazo y la coordinación.
Ahora bien, si que es cierto que las personas que metabolizan lentamente la cafeína pueden tener más riesgo de sufrir un infarto de miocardio si toman más de 4 tazas de café al día. Y esto es importante, la cantidad… porque a mi entender un consumo moderado de café nunca debería pasar las 2 tazas al día (mucho menos 4!).
2. ¿Todos los cafés son iguales para la salud?
No, es preferible el café tostado a bajas temperaturas (tueste natural) y sin azúcar, ya que así se reduce la formación de sustancias tóxicas. Este tipo de café se distingue porque los granos son más claritos.
Conviene que sepas, como dato importante, que la variedad de café arábica contiene menos cafeína que la robusta.
Y que ya si eliges variedades ecológicas y café de comercio justo estarás acertando de pleno!
3. ¿Cuál es el tipo de café menos recomendable?
Pues justamente el contrario: el que se tuesta a altas temperaturas y con azúcar (torrefacto), muy común en España e Italia por cierto.
En este café la concentración de sustancias cancerígenas como la acrilamida y los hidrocarburos aromáticos policíclicos es mayor. Y no se le debería añadir azúcar, edulcorantes ni lácteos.
4. ¿El café daña al hígado?
Definitivamente NO, de hecho una revisión de estudios realizada en 2013 comprobó que el consumo regular de café puede reducir a la mitad el riesgo de padecer cáncer de hígado.
5. ¿Y qué ocurre si tengo colesterol?
Más de 6 tazas al día aumenta los niveles de colesterol total y LDL (el malo). Pero cuando el café es de filtro se retienen los compuestos que causan el incremento. Elige filtros sin blanquear para evitar sustancias cloradas. Y volvemos a lo mismo… un consumo moderado!
6. ¿El café puede crear adicción?
Es cierto que cuando una persona toma café a diario y de repente para su consumo es bastante común que aparezcan síntomas como dolor de cabeza o ansiedad que pueden estar muy relacionados con un síndrome de abstinencia. Pero lo normal es que estas molestias duren como mucho 2 ó 3 días.
7. ¿Durante el embarazo se puede tomar café?
La recomendación es tomar menos de 200 mg de cafeína al día (dos tazas), aunque lo mejor sería limitarla del todo, también durante la lactancia, ya que puede afectar al feto. Además, el café disminuye la absorción del hierro, nutriente especialmente importante durante el embarazo.
8. ¿Es mejor tomar café descafeinado?
Para algunas personas sí: las embarazadas, lactantes y personas que tengan problemas con el sueño a las que la cafeína no les viene nada bien.
Además el café puede aumentar la acidez estomacal y el reflujo, mientras que el café descafeinado y el té no. Si optas por el descafeinado, elige el obtenido «solo con agua» o «con dióxido de carbono».
9. ¿Hay alguna bebida similar al café pero más saludable?
Claro que sí, para mi la más parecida y el sustituto perfecto es el «café de cereales«, por su sabor y la sensación al tomarlo.
También es buena opción el té, que aunque también contiene cafeína es más saludable. El consumo de té está relacionado con una protección de los sistemas óseo y cardiovascular (sobre todo frente a infartos). Además, el té mejora la función arterial y no causa reflujo gástrico.
En este caso el té matcha ecológico es un opción fantástica!
10. ¿El café puede ayudar con la enfermedad de Parkinson?
El consumo de café reduce en un tercio el riesgo de padecer Parkinson y puede ayudar a mejorar sus síntomas, según un estudio del University College London. El ingrediente clave es la cafeína, ya que el té también ayuda, pero el café descafeinado no.
Y una vez aclaradas estas dudas sólo me queda insistir, una vez más, en que la clave está en un COSUMO MODERADO. No tienes que eliminar el café de tu vida si te gusta, no hay por qué, la renuncia no es necesaria. Pero tampoco lo es la dependencia, por eso te invito a que te fijes en cómo es tu relación con el café y que evites toda dependencia, puedes alternar perfectamente días o momento de café por otras bebidas como las mencionadas!